La intubación endotraqueal (en adelante, intubación) se refiere a la colocación de un tubo endotraqueal especial en la tráquea a través de la glotis para abrir la vía aérea del paciente y proporcionar condiciones óptimas para la permeabilidad de la vía aérea, la ventilación y el suministro de oxígeno, la succión de las vías respiratorias y la prevención de la aspiración. La intubación es una técnica importante en el proceso de rescate de pacientes en estado crítico y también es la operación básica para la implementación de la anestesia por inhalación.
Las principales funciones de la intubación endotraqueal:
Mantener abiertas las vías respiratorias: evitar la aspiración de secreciones orales y contenido estomacal.
Ventilación y suministro de oxígeno: un buen suministro de oxígeno y una ventilación asistida ayudan al suministro de oxígeno a los tejidos del cuerpo, lo que puede prevenir complicaciones de manera eficaz y brindar primeros auxilios oportunos en caso de emergencia intraoperatoria.
Control de la profundidad de la anestesia: en comparación con la anestesia por inyección y la anestesia por inhalación con mascarilla, la intubación transtraqueal puede controlar eficazmente la ventilación para controlar la profundidad de la anestesia y, al mismo tiempo, la intubación puede evitar que el gas anestésico se escape al entorno circundante y proteger al personal quirúrgico de inhalar más anestésicos. Reduce el desperdicio de gas anestésico y es más económica.